Si bien aún se encuentra en Beta cerrada, Riot Games ya está tomando acción contra aquellos que hacen trampas en Valorant. Ya 8.873 jugadores han sido “baneados” del juego de disparos en primera persona, por usar hacks u otros tipos de herramientas que les dan ventajas injustas por sobre el resto de los jugadores.
Riot lo anunció en Twitter, amenazando que “esta oleada de penalizaciones es solo el principio“. Por un lado, es admirable que la compañía esté tan dedicada a deshacerse de todos los tramposos antes de que el juego salga en su versión final. Por el otro, los usuarios no están muy contentos con los métodos usados para conseguir este resultado.
Hablamos de Riot Vanguard, el programa anti-trampas que uno debe instalar y tener ejecutado sí o sí al jugar Valorant. Muchos han registrado que el sistema es más bien invasivo, y se mete demasiado en los procesos que tenemos abiertos en Windows (algo necesario para detectar tramposos, según Riot). A pesar de que la compañía aclaró que no estaban consiguiendo información personal de esta manera, y de que le hicieron unos pequeños ajustes para que no invada tanto los ordenadores, muchos piensan que Riot Games debería cambiar de método para detectar a estos jugadores.
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