Según el canal tecnológico Moore’s Law is Dead, Microsoft estaría desarrollando una nueva consola que superaría en potencia a la futura PlayStation 6. Aunque todavía no hay confirmación oficial, el informe indica que el sistema utilizaría un nuevo chip llamado AMD Magnus APU, un procesador que combinaría CPU y GPU en una sola unidad y ofrecería un rendimiento sin precedentes dentro del hardware doméstico.
El objetivo, de acuerdo con la fuente, sería difuminar la línea entre consola y computadora, permitiendo ejecutar juegos no solo del ecosistema Xbox sino también de otras plataformas como Steam o Epic Games Store. La máquina funcionaría con una versión adaptada de Windows 11, lo que la convertiría en una especie de “PC gamer lista para usar”, sin necesidad de configuraciones complejas.
Este salto tecnológico tendría su costo: el precio estimado rondaría entre 800 y 1200 dólares, una cifra bastante más alta que la de las consolas actuales. A cambio, la nueva Xbox ofrecería una experiencia de juego más versátil, con soporte para tasas de refresco más elevadas y un rendimiento gráfico comparable al de una PC equipada con una RTX 5080 o superior.
Por ahora, Microsoft no confirmó ni desmintió la información. La empresa solo reiteró recientemente que trabaja en “la próxima generación de consolas Xbox”. Hasta que haya anuncios oficiales, todo apunta a que este rumor se suma a las filtraciones que mantienen viva la expectativa por el futuro del hardware gaming.